El aire del almena,
cuando yo sus cabellos esparcía,
con su mano serena
en mi cuello hería
y todos mis sentidos suspendía.
Quedéme y olvidéme,
el rostro recliné sobre el Amado;
cesó todo y dejéme,
dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.
Campbell translates these stanzas:
My neck wounded by serene caresses expresses that same longing I resonate with in Donne's "Batter my heart three person'd God."